El fiscal Emiliano Arias de la región de O’Higgins, confirmó a Radio T13 que el arzobispo de Santiago, cardenal Ricardo Ezzati, titular de la diócesis de Santiago de Chile en régimen de prórroga, está siendo indagado por presunto encubrimiento en algunos conocidos casos de pedofilia de parte de miembros del clero, particularmente en dos de ellos: el caso del ex canciller del Arzobispado, el padre Oscar Muñoz Toledo, actualmente en la cárcel, y el caso conocido como “La Familia”, en la ciudad de Rancagua, una organización de sacerdotes que traficaba actividades homosexuales y pedófilas de manera sistemática y programada desde hace años, que fue denunciada ante la Justicia por el obispo emérito de Rancagua Alejandro Goic.
Arias considera que en ambos casos “se podría configurar el delito de encubrimiento”. En el caso específico del padre Oscar Muñoz Toledo, el fiscal declaró que “un hecho que no se puede desmentir bajo ningún aspecto” es que la Iglesia Católica tuvo conocimiento de que había más víctimas del ex canciller y no solo el menor que estaba en la autodenuncia que el padre Muñoz Toledo presentó en enero.
El fiscal manifestó que es muy grave que la Iglesia de Santiago no haya presentado la denuncia ante la Justicia civil, limitándose a tratar la cuestión solo en sus estructuras internas. En este caso, y así se hará siempre a partir de ahora, la justicia actuó de motu proprio porque el arzobispado no parecía capaz de reaccionar. Observó también que “una organización cualquiera sea, la Iglesia Católica o una institución privada, no puede ser que no denuncie ante la justicia civil hechos tan graves como son hoy día atentados sexuales contra menores de edad”. “Sería saludable una modificación legal pequeña que obligue a los sacerdotes a denunciar ese tipo de delitos, tal como lo es para otros profesionales, como los profesores”, agregó.
Por último, Arias puso de relieve que en el caso de Ricardo Ezzati se está investigando el rol que tuvo en dichas circunstancias y se trata de determinar con exactitud qué es lo que sabía o no sabía el cardenal. “Estamos abiertos a todo tipo de hipótesis”, dijo al terminar.
Entre tanto, la prensa chilena recuerda en estos días que no es la primera vez que el cardenal Ezzati es acusado de hechos similares, de ocultamiento y encubrimiento. El abogado de algunas víctimas de Fernando Karadima, ex párroco de El Bosque, el Dr. Juan Pablo Hermosilla, interpuso una demanda por encubrimiento contra Ezzati y el ex arzobispo de Santiago, el cardenal Francisco Javier Errázuriz, pero el delito había prescrito. En esa misma oportunidad Hermosilla observó que “si bien es cierto que el cardenal Ezzati no estaba obligado a denunciar, sus conductas en torno a los abusos ha sido la de evitar que sean conocidas por la comunidad y la justicia criminal”.