¿El español? Goza de excelente salud, mucho más incluso que los países de origen, o quizás precisamente gracias a las periódicas crisis que padecen y expulsan hacia los países anglófonos a millones de inmigrantes que llevan consigo lengua y cultura. Según los últimos cálculos, en Estados Unidos hay más de 50 millones de personas que hablan la lengua de Cervantes, filtrada por las tonalidades regionales de los 19 países de América Latina, entre los 21 donde es la lengua materna. “¿Cuál fue la canción que tuvo más éxito este verano? Despacito” dice el New York Times, y hace notar que, al mismo tiempo, más de 20 estados promulgaron leyes para establecer que el inglés es el idioma oficial”, y que el presidente Trump “ganó las elecciones con una plataforma que incluía la promesa de construir un muro en la frontera y la propuesta de fijar nuevos límites a la inmigración ilegal”, entre ellos que quien solicita el ingreso al país debe hablar inglés para poder obtener la residencia legal.
Uno de los géneros musicales más escuchados de una costa a otra es el reguetón, nacido en Costa Rica, que se puede escuchar en todas las radios del gran país del Norte, por los altoparlantes de los locales comerciales, en las estaciones de servicio y en los supermercados latinos. Y si el chino mandarín, con sus 898 millones de hablantes le saca mucha ventaja al inglés, el español ocupa el segundo lugar con sus 437 millones de personas que lo hablan, según las estimaciones de Ethnologue — un compendio de los idiomas que se hablan en el mundo -, que coloca al inglés en tercer lugar con 372 millones, seguido por el árabe, el indú, el bengalés, el portugués (gracias a Brasil) y el ruso.