Miguel Rodríguez Arias, el director, se puso la cámara al hombro y empezó a filmar pocos días después de que su compatriota se asomó a la logia de San Pedro vestido de blanco. Tenía en claro un objetivo, llegar antes que ningún otro a la cita con el primer aniversario del pontificado y relatar la “revolución de la equidad” que el Papa sudamericano está llevando a cabo en el seno de la Iglesia. El cineasta argentino, premio “Rey de España” 1997, cuenta con la ventaja de conocer a Bergoglio y los lugares donde transcurrió su vida, además de “muchísima curiosidad”, asegura, por comprender por qué la Iglesia ha dado un “golpe de timón tan fuerte” eligiendo a un jesuita como él para guiarla en este momento de la historia de la humanidad.
“Ha sido una larga investigación, de ocho o nueve meses, durante la cual fuimos descubriendo paso a paso quién era Bergoglio”, cuenta. La película documental “Francisco de Buenos Aires” se basa en casi 50.000 horas de grabaciones audiovisuales que incluyen, entre otras cosas, imágenes inéditas de archivo.
Miguel Rodríguez Arias utiliza con solvencia e imaginación la técnica documental, como lo demuestran sus trabajos anteriores: “Las patas de la mentira” y “El nüremberg argentino”. “Francisco de Buenos Aires” no elude –anticipa el director- la faceta política de la personalidad de Bergoglio-Francisco, ni, por supuesto, la religiosa, cuya fuerza –afirma- “consiste en el hecho de que predica con el ejemplo”.
Son muchas las entrevistas: desde María Elena Bergoglio, la única de las cuatro hermanas del Papa que todavía vive, y compañeros de la escuela primaria, pasando por el escultor argentino Fernando Pugliese, autor del parque temático Tierra Santa de Buenos Aires, hasta el cardenal argentino Jorge Mejía, rabinos y amigos de Bergoglio.
Rodríguez Arias jura que el Papa sabe lo que está haciendo y que muy pronto verá su trabajo junto con él y todo su equipo. Después, a partir del 19 de marzo, llegará el juicio de los espectadores argentinos, de los que Arias no desconfía: “Cuando la gente salga del cine sabrá perfectamente quién era Bergoglio y por qué el Colegio de Cardenales eligió un Papa tan singular para gobernar la Iglesia”.
La columna sonora del filme es de la banda argentina Vox Dei, que corona 46 años de vida. Toda una historia de música rock dentro de la historia argentina, desde Perón hasta Bergoglio.