30 mil kilómetros que conectaban los cuatro puntos cardinales con la capital, Cuzco. Este entramado de rutas y senderos atraviesa seis de los actuales países de América Latina y ha sido declarado por la UNESCO patrimonio mundial de la humanidad. Por el Qhapaq Ñan, camino del Inca en lengua quechua, se desplazaba el comercio precolombino, pero también el oro y la plata saqueada por los españoles.
El Qhapaq Ñan es la red más antigua de América. Atraviesa Argentina, Chile, Bolivia, Perú y Ecuador y recorría longitudinalmente la Cordillera de los Andes desde el sud de Argentina hasta la Colombia actual, con una extensión superior a los 60.000 kilómetros de sur a norte.
El país moderno que contiene la mayor extensión del antiguo recorrido del camino del Inca es Perú y allí se encuentra el tramo más famoso, que parte de la ciudad de Cuzco y llega hasta el Machu Pichu. Son 43 kilómetros en medio de bosques y escaleras de piedra milenarias.
El reconocimiento de la UNESCO permitirá a los gobiernos de la región acceder al financiamiento de organismos internacionales destinados a la conservación y restauración de las reliquias de sus antiguas civilizaciones.