Tal como fue anunciado el martes pasado en la capital colombiana Santa Fe de Bogotá por el Presidente Manuel Santos, Premio Nobel de la paz 2016, se firmó hoy el Acuerdo definitivo de paz entre el gobierno y la ex guerrilla de las FARC. Después será el turno del Congreso, que deberá refrendar, tras una primera votación general y una amplia discusión posterior, la entrada en vigor del Acuerdo renegociado en La Habana a consecuencia del triunfo del “no” en el referendo del pasado 2 de octubre.
Las oposiciones, en particular el ex Presidente Álvaro Uribe y como era más que previsible, han descalificado el nuevo texto fruto de la renegociación, en el curso de la cual se incorporaron 56 de las 57 modificaciones que requerían los grupos y partidos del “no”.
Los partidos que apoyan el Acuerdo – Unidad por la paz – representan en el Congreso el 80% de los votos y por lo tanto parece segura la aprobación cuando el texto sea entregado a los parlamentarios. Mauricio Lizcano, Presidente del Congreso colombiano, declaró que “Hay unas mayorías amplias que respaldamos la paz. Sabemos que es una necesidad del pueblo colombiano. Entendemos que deseamos poder vivir en paz y estamos a la espera de que así sea. Tenemos que sacar adelante este proceso por la paz, porque el cese al fuego es inestable, porque tenemos que darle una salida definitiva”, agregó.
La prensa local interpreta estas declaraciones como una respuesta severa al ex Presidente Álvaro Uribe, líder del “no”, que sigue oponiendo un fuerte rechazo al acuerdo renegociado. No faltan las críticas contra el ex gobernante porque muchos consideran que “el rechazo es solamente un pretexto para continuar en el centro del escenario político y acrecentar sus expectativas electorales para una nueva presidencia”.
El Acuerdo renegociado, que se firmó en el día de hoy, podría ser entregado al Congreso mañana a la mañana, a fin de que este pudiera votarlo en un plazo relativamente breve. Después, en una etapa posterior, será sometido a discusiones en forma puntual. Es probable que se introduzcan modificaciones en el texto, pero solo secundarias, destinadas a perfeccionar o puntualizar determinados aspectos. Cuando el texto sea aprobado, el Acuerdo entrará en vigor inmediatamente, sin ulteriores pasos institucionales.
Una copia de este Acuerdo se entregará al Papa la segunda semana de diciembre cuando reciba la visita del Presidente Manuel Santos, quien a lo largo de estos meses mantuvo continuamente informado a Francisco sobre el desarrollo de las negociaciones.