Caterpillar no solo demuele, sino que también construye. Ese parece ser el mensaje del medio millón de dólares que la empresa estadounidense ha puesto a disposición de la Fundación cubana Finca Vigía para la conservación de los documentos y objetos de la casa de Ernest Hemingway en Cuba. La donación, además, está destinada a la construcción de un edificio anexo para instalar un taller con sus correspondientes archivos en el museo dedicado a Hemingway en La Habana. Otro aspecto que se subraya en el anuncio que dio la misma multinacional a la prensa internacional es la construcción misma del Taller, que será realizado con materiales provenientes de Estados Unidos, convirtiéndose en la primera obra que emplea elementos directamente importados del vecino ex enemigo desde el comienzo del embargo –que por otra parte sigue formalmente vigente- hace 55 años.
Ernest Hemingway vivió 22 años en Cuba y allí coleccionó trabajos y recuerdos de toda una vida, desde correspondencia hasta las pruebas de impresión de sus libros y miles de fotografías, libros, trofeos de caza, discos y armas, incluyendo la famosa máquina de escribir que generalmente usaba de pie. En la Finca Vigía, tal como se conoce su casa, escribió algunas de sus novelas más famosas, como El viejo y el mar, con la cual ganó el Nobel de literatura en 1954.