Tres presidenciales y algunas legislativas modificarán sensiblemente el panorama electoral latinoamericano antes de que estallen los fuegos artificiales a fines de 2017. Ecuador elegirá al reemplazante de Rafael Correa en febrero, Chile al de Michelle Bachelet en noviembre y Honduras concurrirá a las urnas para confirmar en un segundo mandato al actual presidente Juan Orlando Hernández o sustituirlo. En los dos primeros casos los presidentes salientes no participarán en la contienda electoral, en el tercero sí.
En Ecuador, las elecciones se han fijado para el 19 de febrero; si ninguno de los candidatos alcanza la mayoría absoluta habrá segunda vuelta, prevista para abril, entre los dos candidatos más votados en la primera. En esa misma jornada electoral los ecuatorianos deberán votar también por 137 diputados de la Asamblea Nacional, el Parlamento unicameral creado por la Constitución de 2008 que se renueva completamente cada cuatro años.
El candidato de la coalición oficialista, una alianza de quince partidos, Lenín Moreno, muestra una ventaja prácticamente en todos los estudios de opinión con el 30% de aprobación, y aunque en los últimos tiempos los relevamientos preelectorales en América Latina terminaron ruidosamente desmetidos, como ocurrió también en otras latitudes, es previsible que el candidato de Alianza PAIS sea el nuevo presidente de Ecuador. Ex empresario y miembro destacado de su partido, Moreno fue vicepresidente de Correa en su primer mandato (2007-2013) y recibió del Secretario General de las Naciones Unidas Ban Ki Moon el nombramiento de Enviado Especial para la Discapacidad y Accesibilidad. Desde 1998 él mismo se encuentra recluído en una silla de ruedas debido a la lesión provocada por un disparo a quemarropa durante un intento de robo. En caso de triunfar, Moreno tendrá la no fácil tarea de recoger la herencia política de Correa, sin duda uno de los presidentes más populares de la historia reciente de Ecuador. Sus opositores en las elecciones de febrero no han logrado converger en un único nombre y se presentarán en forma independiente con los tres candidatos que catalizaron más votos en los sondeos realizados hasta el momento: Guillermo Lasso, de centro derecha, ex super ministro de Economía en el gobierno de Jamil Mahuad entre 1998 y enero de 2000, Cynthia Viteri, del Partido Social Cristiano, que en agosto fue expulsada de Venezuela porque visitó algunos presos políticos, entre ellos los famosos Antonio Ledesma y Leopoldo López; y Paco Moncayo, un ex militar que fue alcalde de Quito durante dos mandatos consecutivos y se ubica en una línea política de centro izquierda que coincide en muchos puntos con el presidente saliente Rafael Correa.
La elección presidencial en Chile se celebrará a fin de año, en noviembre. Puede tener una segunda vuelta con balotaje, como prácticamente todos los países de América Latina. Con diez meses por delante, las previsiones son muy aleatorias y por el momento solo a título de orientación se puede hacer referencia a algunos estudios – cinco para ser más exactos – que dan una ventaja del 26 por ciento en la intención de voto al ex presidente Sebastián Piñera. Detrás de él, a poca distancia, se ubica el senador independiente Alejandro Guilliere, con un pasado de periodista en la prensa escrita, radio y televisión que le ha dado una amplia popularidad y una carrera política en el Partido Radical Socialdemocrático que confluyó en la alianza Nueva Mayoría. El tercer puesto en las encuestas lo ocupa el socialista Ricardo Lagos, político de larga trayectoria y presidente de Chile desde el 11 de marzo de 2000 hasta el 11 de marzo de 2006.
La elección presidencial en Honduras está prevista para el 26 de noviembre. Junto con el presidente hondureño se elegirán también 128 diputados para el Congreso, 20 miembros para el Parlamento Centroamericano, 298 alcaldes y otros tantos vice. La contienda electoral gira en torno a la reelección presidencial después que el Tribunal Electoral de Honduras declaró que la polémica resolución de la Corte Suprema de Justicia que habilita al presidente saliente para un nuevo período es “definitiva, inmutable, de aplicación general y cumplimiento obligatorio”. La candidata a disputar la presidencia al actual jefe de Estado Juan Orlando Hernández será nuevamente Xiomara Castro, esposa del lídel del partido hondureño Libertad y Refundación (Libre), José Manuel Zelaya, depuesto en 2009 en circunstancias equiparables a un golpe de estado. Esta es la segunda candidatura de Castro, quien anteriormente se presentó en las elecciones presidenciales de 2013 y proclamó su triunfo antes que se anunciaran los resultados oficiales que consagraron en cambio como nuevo presidente a Juan Orlando Hernández del Partido Nacional.
En México habrá elecciones nacionales el 4 de junio para el cargo de gobernador en los estados de Coahuila, México, Nayarit y Veracruz, donde también se votarán 272 alcaldes.
Las elecciones legislativas en Argentina se llevarán a cabo el 27 de octubre y renovarán 24 escaños del Senado para el período 2017-2023. También se elegirán 127 diputados que estarán en el cargo hasta 2021. Resulta evidente la importancia política que revisten tanto para el gobierno de Macri, que podrá medir entonces el nivel de apoyo a su proyecto de modernización del Estado, como para la desorientada oposición peronista, que se encuentra en un proceso de refundación de su propia capacidad de gobierno.